ALQUERÍA DEL DUC


El primer punto de interés de la ruta se sitúa en el parque de la Alquería del Duc, donde se encuentra una alquería fortaleza con todas sus dependencias en el interior de las gruesas paredes que la conforman. Enclavada en uno de los entornos más bonitos de la comarca, en las faldas del Castillo de Bairén y junto al marjal y los afloramientos de agua dulce, de los cuales podemos recorrer a su alrededor por unas pasarelas de madera, que nos permiten ver y apreciar, su fauna y flora. La alquería debió tener al principio un carácter militar como puesto avanzado de vigilancia donde se efectuará el relevo de las patrullas costeras ante las frecuentes incursiones de piratas y bereberes. A su lado hay restos de una necrópolis de época visigoda. Actualmente es la sede del Centro de Desarrollo Turístico (CdT) de la Generalitat Valenciana y funciona como hotel-escuela.

 

En cuanto al edificio, podemos hablar de que en el primer piso se encontraba la residencia señorial donde había un salón, una capilla y habitaciones decoradas con materiales lujosos. La alquería fue propiedad en 1568 de Domingo Aleixandre, un vecino de Gandia que la vendió en 1590 a Alonso de Borja, último hijo del duque Francisco de Borja, y responsable de hacer las reformas necesarias para convertirla en alquería señorial y lugar de veraneo. A su muerte pasó en manos de la viuda, Leonor de Noroña. En 1600 pasó en manos del duque Carlos II de Borja por 1.700 libras. A mediados del siglo XVIII los duques arrendaron la explotación directa de la finca, que con los años pasaría en la Cámara Local Agraria hasta su desaparición, cuando el edificio revertiría en el ayuntamiento.

A su fachada sur destaca un reloj de sol del 1780, ante el cual hay los restos de una necrópolis paleocristiana de los siglos IV-VII. Veremos que la cantonera noroeste de la alquería no cuenta con garita, puesto que en su lugar hay los restos de una torre de ladrillo que contrasta con el resto del conjunto, de argamasa y piedra. Se trata de los restos de una antigua torre defensiva del siglo XIV donde posiblemente se efectuaría el relevo de las patrullas costeras que vigilaban el litoral ante los ataques de piratas berberiscos.